martes, noviembre 4

el reporte de lecturas viene flojo porque no pasa nada.

los cuentos de Poli pasaron sin pena ni gloria. ni siquiera soy capaz de explicar por qué terminé ese libro y no lo incineré después de leer el pseudohomenaje a Fontanarrosa que es tan patético que desata la ira. se ve que el libro es un rejunte de ejercicios de taller literario y que todos han sido publicados tal y cual fueron perpetrados, con la consigna ahí a flor de piel y a la vista de todos... si fuera un shopping, mi viejo diría que es pornográfico.

ahora estoy con El Peletero de Luis Guzman, que es la historia de un peletero en baja (si llego a encontrar un motín antigreenpeace lo nomino a libro del año), con un freezer lleno de pieles que se están pudriendo, que se cruza con otro personaje medio buscavidas con el plan de incendiar la peleteria para cobrar el seguro. por ahora, nada destacable. seguiremos informando.


archivado en: pasando lecturas

No hay comentarios.: