así como los supermercados tienen sus especímenes característicos (que algún día empezaremos a analizar desde esta ducha), la playa es habitada por una fauna típica que incluso se organiza socialmente como la mejor escala zoológica. algunos ejemplares de este fascinante ecosistema son:

- el *lector* es un ejemplar que se observa en la playa toda. su material de lectura: el hombre se dedica a los diarios, la autoayuda, marketing y, como mucho, algún libro de actualidad "periodístico", "político", "de investigación" o autobiográfico (el pelotudo argentino, por ejemplo). el preferido es dan brown. las mujeres, en cambio, eligen las revistas gente y caras, el new age y la autoayuda femenina, los horóscopos y los best sellers, sobre todo si son de coelho y compañía.

- el *aristóctrata carpero*, exclusivo de este lado de la cuerdita, es un señor generalmente guapo que se abstrae de todo (y sobre todo de su familia) y se instala en la puerta de su feudo para dedicarse a la lectura de algo más interesante que el material del *lector* y, ocasionalmente, a la contemplación de bikinis. al mar va solo, cuando los suyos le invaden el chiringuito. se trata, lamentablemente, de una especie en vías de extinción.

- el *crucigramero* es el que se compra una gruesa de revistas de juegos y las tiene todas juntas apiladas al lado de la reposera porque se le acaban enseguida: después de abandonar el primer autodefinido, se dedica exclusivamente a las sopas de letras.

(continuará...)


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